
Como todo seguirá igual, me doy cuenta de que el día de mi cumpleaños no merece la pena celebrarlo porque me encontraré con el mismo asco de siempre. Es más, algunos ni felicitarán siquiera. La verdad es que no me ilusiona demasiado tener que celebrar nada, porque basicamente el que se va a tener que preocupar soy yo.
Y como estoy harto de preocuparme... Supongo que me tendré que conformar con las felicitaciones de tuenti. Hasta otro cumpleaños.