Hallowed be thy name

Doy un salto de sentimientos a temas sociales, ahora que mi alma, mi mente y mi corazón están relajados jugando a las cartas. Damas y caballeros, de los creadores de "¿Qué le pasa a mi corazón?", ahora llega la súper producción "Maldita semana santa".

Y es que la gente tiene que aguantar la semana santa por obligación, guste o no. Si a la gente no le gustan los toros no va al estadio y punto. Pero la semana santa pasa por la puerta de mi casa, entre el otro ciento y pico de personas que no pueden salir de su casa por el trozo de hierro y madera ese. Para colmo, no comprendo el porqué hay gente de mi edad que ni son religiosos ni nada, pero colaboran en la semana santa. ¿Para qué? Para no dejarme ver la televisión tranquilo en casa. Para hacer vibrar el escritorio del ordenador con los tamborcitos de dios. ¿Y qué? Pues me tengo que aguantar en casa o salir a la calle porque debo respetar. Ellos no me respetan a mí.

Tranquilos. He descubierto el plan. En realidad son dos:

• Plan One: Amplificador potente de 45W encima de la cama de mi hermano, apuntando a la ventana abierta de par en par (vivo en un 2º piso). Guitarra enchufada y ¡Caña! Red Hot Medinaceli Papers. Yo podré disfrutar de darle potencia a la guitarra. Total, ellos tienen a todo volumen la banda de música.
• Plan Two: ¿Qué música les puede molestar más? ¿Un Master of Puppets a toda leche en la ventana o quizás Hallowed be thy Name bien potente? El caso es escuchar a todo placer buenos temas, opuestos al muñequito ese que trae una banda atrás.

Lo que no entiendo es respétalos, pero que me respeten a mí. Cuando me afecta directamente y me es perjudicial, no me hace ninguna gracia. Deja vacío el paseo marítimo (principal foco de ambiente social del pueblo), llena el pueblo de basura, limita a la gente haciéndola arrastrarse por todo el pueblo detrás de un trozo de material inerte, no deja aparcar frente a casa, no te deja salir porque todo el pueblo está en tu puerta sin dejarte salir, no te deja tampoco estar en casa como quisieras. No respeta, y yo me lo pasaré genial con mi música. Si no estuvieran mis padres añadiría como plan three un pigeon ensayo.


En fin...